Un disco deformado es algo bastante común cuando tienes una colección de discos y, a pesar de los esfuerzos por evitarlo, es más que probable que te suceda varias veces.
¿Por qué se deforma un disco de vinilo?
Los discos de vinilo se deforman debido al calor excesivo, la presión, el peso y la luz directa, y a menudo se ven afectados por una combinación de varias.
Un almacenamiento cuidadoso, ayudará a minimizar el riesgo de que tu disco se deforme
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Calor excesivo
Un exceso de calor hace que un disco de vinilo sea maleable y, por tanto, susceptible de doblarse y deformarse.
El cloruro de polivinilo, más conocido como PVC, constituye el 96% de la mezcla de resina que se utiliza para crear un disco de vinilo, y el PVC tiene una baja estabilidad térmica.
Esto significa que la exposición al calor, los rayos UV y la contaminación hacen que el disco sea vulnerable a los daños.
Por lo general, el PVC tiene una temperatura máxima de funcionamiento de unos 60ºC, momento en el que se producirá la distorsión debida al calor. De hecho, a menudo se produce incluso antes de alcanzar ese nivel. Así, un disco de vinilo suele deformarse cuando su temperatura ambiente se acerca a los 60ºC.
En pocas palabras, cuando los discos de vinilo se calientan demasiado, el componente de PVC del disco reacciona ablandándose y el disco puede perder su forma.
Luz solar directa
Como se ha mencionado, los rayos UV tienen un impacto en el vinilo y también pueden debilitar el disco, dejándolo vulnerable a la deformación.
La luz solar directa tiene un doble impacto de UV y de calor, por lo que puede ser especialmente perjudicial para los discos.
Demasiada presión
Incluso sin los dos factores mencionados, la presión y el peso excesivos aplicados a los discos pueden hacer que se deformen con el tiempo.
Esto suele manifestarse por un mal almacenamiento de los discos, cuando se apilan de forma incorrecta, se dejan apoyados unos contra otros o, en general, no se tratan con cuidado.
Basta con dejar un disco ligeramente inclinado durante un periodo de tiempo para que se deforme un poco, y si se añade un poco de calor y/o luz solar a la mezcla, las condiciones son perfectas para que se deforme.
¿Cómo se puede saber si un disco está deformado?
A veces es evidente que un disco se ha deformado, pero a menudo no está tan claro.
Hay dos maneras de saber si un disco está deformado: visualmente o auditivamente.
Si sostienes el disco en alto, podrás ver si su superficie es fiel y plana, o si está alabeado.
Sujétalo a la altura de tus ojos y mira a través de la superficie del disco desde su borde exterior hacia el orificio del eje en el centro del disco. Debería ser bastante fácil determinar si el disco está plano, o si está alabeado.
También puedes colocarlo en una superficie plana, como una mesa, con una capa protectora debajo, y ver cómo queda en esta superficie plana.
Al escuchar un disco, podrás detectar la deformación a través de las variaciones en el wow y el flutter.
El wow y el flutter son variaciones de tono que se oyen con cada revolución del disco: el wow suele ser un cambio de tono más lento, y el flutter, más rápido.
El wow y el flutter no siempre son detectables si son mínimos, y también pueden estar causados por otros factores mecánicos del equipo en el que se reproduce el disco, pero inspeccionando el disco visualmente y prestando mucha atención a la calidad del audio, deberías ser capaz de establecer si el disco está deformado.
Cómo evitar que un disco se deforme
- Un buen almacenamiento de los discos es la clave para evitar que se deformen.
- Asegurarse de que los discos se guardan lejos de la luz solar directa es el primer paso para evitar que se deformen.
- Evitar el calor y los rayos UV generados por la luz del sol evitará que los discos se sobrecalienten, y si puedes mantenerlos almacenados a una temperatura ambiente de entre 18 y 21ºC, se mantendrán en condiciones óptimas.
- Y, por supuesto, mantener los discos almacenados en posición vertical, sin grandes lotes apoyados unos sobre otros, es crucial para evitar la lenta acumulación de peso y presión que puede deformarlos con el tiempo.
Cómo arreglar un disco que ya se ha deformado
Siempre existe el riesgo de que los discos se deformen, aunque se tenga cuidado al guardarlos y manipularlos. Además, a veces acabas comprando discos de segunda mano que están ligeramente deformados, y no te das cuenta hasta más tarde.
La forma más sencilla de aplanar un disco, es simplemente colocarlo entre dos objetos planos pesados (pero no superpesados) y dejarlo durante un buen rato.
- Limpia bien el disco antes de hacerlo, para eliminar cualquier suciedad o residuo potencialmente dañino.
- Protégelo adecuadamente colocándolo dentro de una funda interior fresca no estática.
- Colócalo en posición horizontal sobre un paño que no suelte pelusa y otro encima; el objetivo es amortiguar el disco para que sus surcos no se aplasten en el proceso.
- Una vez que el disco esté listo, colócalo con cuidado entre dos objetos pesados, como un par de libros grandes
- Déjalo reposar durante unos días, lo que ayudará a aplanarlo de nuevo. Es posible que tengas que dar una segunda vuelta, dependiendo de lo deformado que esté el disco.
Es mejor este método porque es mucho menos arriesgado que otros métodos que se sugieren.
Verás algunas sugerencias de colocar los discos entre láminas de cristal en un horno, lo que, para ser sincero, me parece bastante ridículo, ya que no sólo es poco práctico, sino que es complicado y potencialmente peligroso.
La única otra forma que recomendaría para arreglar un disco alabeado sería buscar un servicio profesional -hay estudios que pueden aplanar los discos alabeados- o, si tienes dinero, ganas y también un gran botín de discos de segunda mano para enderezar, conseguir un aplanador de discos especial.
¿Se puede reproducir un disco deformado?
Si el alabeo de tu disco es mínimo y no te molesta, puede que te preguntes si puedes reproducirlo a pesar de ello.
Siempre es aconsejable evitar reproducir un disco deformado, ya que puede afectar a otras cosas.
La reproducción de un disco alabeado puede ejercer una presión excesiva sobre la aguja y el cantiléver del tocadiscos, y al dañarlos no sólo afecta a su equipo de audio, sino que también puede dañar otros discos que se reproduzcan posteriormente en él.
Los discos muy deformados pueden hacer que la aguja salte, lo que puede dañar gravemente la aguja, el cantilever y la cápsula del giradiscos, así como los surcos del disco ya deformado.
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